sábado, 23 de agosto de 2008

De Leonora Carrington…

Paseando por “Reforma” en la Ciudad de México, me topé hace algunos meses con una exposición de las pinturas y escritos de Leonora Carington. Y para ser sincero, bien se podría hacer un post completo de cada escrito de ésta mujer…


Que bueno que los caracoles son lentos… si fueran rápidos, se acabarían los bosques.
Leonora Carrington.

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Nunca me considere una “femme - enfant” como André Breton quería ver a las mujeres. Ni siquiera que me tuvieran por una, ni traté de cambiar al resto, sencillamente aterricé en el surrealismo; nunca pregunté si tenia derecho a entrar.
Leonora Carrington…

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Cansada de deambular, pesarosa por la tristeza y el chocolate, los faisanes rellenos, el puré de ostras, la créeme y otras delicadezas del estilo que englutía sin parar para llenar el vacío que le producía la actitud helada de su marido, se tumbó lánguidamente sobre un artilugio especial que tomó por un sillón. Imagina este artilugio especial era precisamente el último invento de mi tío J.Edgworth

El artefacto de gran precisión estaba lleno hasta el tope con 900 galones cuadrados de secreciones seminales de todos los animales machos de la propiedad. No sólo de los magníficos sementales árabes, los cerdos reales, los pequeños gallos y los inmensos coq-qu-vin, sino también erizo tras erizo, terriblemente mezclado con los murciélagos y patos comunes.

El tacto me impide relatar las reacciones bioquímicas de mi madre.

En breve, una panza hinchada que creció y creció hasta que en su punto más álgido era de una magnitud terrorífica y estallo con tal temblor que se oyeron las vibraciones a lo largo y ancho de la isla.

Así nací yo.


Carta de Leonora Carrington a Remedios Varo.

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“Encuentro que la inspiración de pintar se beneficia de un estado mental bucólico y opaco, y de un estómago constantemente relleno, preferiblemente relleno de comidas pesadas e indigeribles como el chocolate, las tartas, el mazapán […] por eso pintaba cosas tan bellas cuando estaba embarazada, no hacia otra cosa que comer.” Leonora Carrington…

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El deber del ojo derecho es sumergirte en el telescopio, mientras que el ojo izquierdo interroga el microscopio.
Leonora Carrington…


Es el tipo de mujer por la cual… le pediría al tiempo que vuelva…


I will find you... somewhere in time

3 comentarios:

Vocho dijo...

yeah yo he visto tambiene sta exposición y me ha agradado mucho, q bueno q le diste espacio en tu blog

XI-MENA LEÓN dijo...

Cuando yo vi esta exposición también me impacto es bueno conocer personas como tu que le diste un especio a esta mujer tan interesante

El hombre cósmico… dijo...

Pues mucho gusto!...tmb creo que saber que el interes no es particular, es algo bueno...

Saludos hasta tus lares...