“Al perderte yo a ti, tú y yo hemos perdido:
Yo porque tú eras lo que yo más amaba
y tú porque yo era el que te amaba más.
Pero de nosotros dos, tú pierdes más que yo:
Porque yo podré amar a otras como te amaba a ti
pero a ti, no te amarán como te amaba yo.”
Al fin entendí que no hablabas de soberbia… es verdadero amor… amor propio…
Perdona si alguna vez te insinué soberbio Ernesto… No entendía…
Ayer di un breve recuento por los bultos de mi vida… Dios mío, en verdad que fui tonto… Cuántos años invertidos en la comodidad cotidiana por querer vivir junto al bulto y cuántos años de enojo porque los bultos nunca me entendieron… La verdad es que nunca fue culpa de ellas, la culpa es mía… por pensar que en un bulto iba a encontrar la paz que busco… ingenuo en verdad…
Siempre fue mi ego el que quería que las cosas funcionaran… no yo… Las cosas junto a un bulto nunca funcionan… y al Ego no le gusta aceptar que nunca fue lo que el ego pensó que era… y eso me convertía en un bulto para ellas también…
Perdón pido a todas las bulto de las cuales fui un bulto también… tal vez la culpa la tenga el sexo… con tal de tenerlo puedes creer que la mujer next door está hecha de la séptima esencia…
Tú y Gustavo tenían razón:
“Separarse de la especie, por algo superior… no es soberbia, es amor…”
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